11/01/2022
Nueva llegada a la gama de máquinas agrícolas «fabricadas en Sicma»: la aporcadora para hortalizas completa la gama de productos destinados a la horticultura.
Para los profesionales de la horticultura, la aporcadora es una máquina indispensable que permite conseguir una cosecha de calidad, con miras a la optimización de costes y del trabajo.
El uso de esta máquina tiene muchas ventajas.
La aporcadora se aplica en la parte posterior de la fresadora y puede utilizarse en todo tipo de suelos para crear un lecho de siembra o de trasplante óptimo, principalmente para hortalizas.
La aporcadora permite trabajar el suelo muy finamente y forma un montículo de suelo continuo, nivelado, no excesivamente compacto y trapezoidal – llamado aporca. Es precisamente esta sección elevada la que albergará las hortalizas u otros cultivos.
Manteniendo el suelo más fino en la superficie, la aporcadora crea las condiciones ideales para plantar y cultivar verduras, fresas, azafrán, frutas del bosque, espárragos, patatas y muchos otros cultivos que se benefician de la técnica de cultivo.
El suelo finamente trabajado y poroso favorece así la recirculación del aire y del agua y las condiciones de la zona de siembra mejoran, dando lugar a un desarrollo armonioso de las raíces con una rápida germinación. También ayuda al crecimiento óptimo de los cultivos, a la vez que aumenta la calidad de toda la producción.
El uso de una aporcadora Sicma, creando un suelo adecuado para el crecimiento de las hortalizas, permite obtener una serie de ventajas tanto en términos de fertilidad y la calidad de la cosecha, así como en términos del método de procesamiento.
Las principales son:
El suelo trabajado con la aporcadora permite drenar el agua fácilmente, minimizando el riesgo de podredumbre y enfermedades. El equilibrio adecuado entre el agua y el oxígeno en un suelo blando, ni demasiado compacto ni demasiado húmedo, asegura que las raíces se desarrollen de manera óptima.
Al eliminar los riesgos de estancamiento del agua, también ayuda a combatir la formación de organismos nocivos (como insectos y plagas) que podrían afectar a la salud de las hortalizas, arruinando la cosecha.
Con nuestra aporcadora, solo un paso es suficiente para preparar el terreno, ahorrando recursos y tiempo de trabajo y reduciendo las intervenciones adicionales necesarias. Además, esta transformación permite simplificar y acelerar la recolección de las hortalizas.
Este tipo de suelo permite optimizar el uso de agua, fertilizantes, insecticidas y, en general, realizar tratamientos más racionales y específicos: de esta manera, los residuos y la dispersión en el medioambiente son limitados, al tiempo que se reduce la contaminación resultante de la transformación agrícola.
En conclusión, la aporcadora Sicma está especialmente indicada para preparar el suelo, sobre todo en cultivos hortícolas, creando las condiciones químico-físicas ideales para el crecimiento de las plantas; al mismo tiempo, permite intervenir de manera específica, limitando el número de pasadas por el suelo.
Dependiendo de sus necesidades y del tipo de cultivo, puede solicitar una aporcadora «a medida». La personalización puede realizarse teniendo en cuenta las dimensiones en altura y anchura del aporcado.
Al elegir el tipo de aporcadora, es importante que el operador considere con precisión sus necesidades de cultivo, ya que debe estar relacionado con una serie de parámetros técnicos que van desde las dimensiones (ancho y profundidad de trabajo) a la potencia del tractor, incluso a la velocidad de rotación de la cortadora a la que se aplica.
Además, un parámetro fundamental es la consistencia del suelo en el que se realizará el trabajo. Los suelos arcillosos se procesan de manera diferente a los suelos tenaces o suelos con una alta presencia de piedras, por lo que las configuraciones específicas para las máquinas se definirán con precisión según los diferentes tipos de suelo.
Es igualmente importante identificar el grado de fragmentación de la tierra que se desea obtener. De este último aspecto se deriva una correlación relativa a la eficiencia de las operaciones de aporcado: una sola pasada, cuando sea posible, favorecerá naturalmente un mayor rendimiento de productividad.
Dada la fuerte personalización de las aporcadoras Sicma, el equipo de diseño desarrolla y produce cada máquina de acuerdo con las instrucciones precisas de los usuarios: por esta razón su realización lleva más tiempo que la media, siempre con la garantía de la calidad del Made in Italy, de siempre el valor fundacional de Sicma.